El laboratorio de Genética de la Conservación en la Universidad de Arizona trabaja para conservar y proteger a los animales silvestres, debido a que la urbanización, que provoca pérdida de hábitat y endogamia, y el tráfico ilegal de animales silvestres o partes de animales silvestres, están acabando con la vida de estos animales.
Una de las mayores amenazas para las especies salvajes es la pérdida de la diversidad genética a través de la endogamia. Entonces los investigadores utilizan técnicas genéticas para determinar si las pequeñas poblaciones que quedaron aisladas son puras o en peligro de convertirse en puras.
Este grupo de trabajo va al rescate de una especie si ve que su población es pura. Introducen individuos de otras poblaciones en la que se encontró que ya sufre de endogamia y se le da seguimiento para observar si se lleva a cabo correctamente la recombinación genética.
La genética también puede usarse para identificar a las especies en áreas en las cuales antes no se sabía que existían. Otra utilidad que se tiene es la de identificar a las víctimas y a los delincuentes en crímenes de la vida silvestre tal y como se utiliza para los casos humanos, por ejemplo en casos de tráfico ilegal a nivel internacional o en caza furtiva. Toda esta evidencia puede ser presentada ante una corte.
Esta nota fue propuesta por Mariana Martínez Pérez.
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Es bueno que gracias a la genética se puedan identificar razas puras para poder salvarlas, pero me parece que no debería de haber distinción para salvaguardar a toda la biodiversidad puesto que todos somos importantes.
ResponderBorrarMe alegra que se esten realizando investigaciones y trabajos para salvar a especies que se encuentran en peligro de extincion , debido a la endogamia.
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